DÍA MUNDIAL DE LA EDUCACIÓN

El 24 de enero se celebra el Día Internacional de la Educación, una fecha proclamada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con el objetivo de concienciar a todo el planeta de la importancia de la educación para conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Concretamente el Objetivo número 4 establece una Educación de Calidad.

Desde la celebración de este día el pasado año 2020 hasta el actual se han dado una serie de cambios que nunca creeríamos que sucederían. Una pandemia a nivel mundial provocada por la crisis de la COVID-19 hizo que el mundo empezara a adaptarse a los nuevos cambios, nueva normalidad.

Cierres de centros educativos en todas las etapas, modificación de hábitos educativos y saludables, así como la adaptación de los alumnos y las familias a las clases on line puso de manifiesto que no estábamos preparados para adaptarnos a esta nueva normalidad.

Recuperar y revitalizar la educación para la generación Covid-19′ es el tema del Día Internacional de la Educación 2021.

La aplicación de la tecnología digital a la educación que potencia la calidad de la educación ya era una meta, pero la pandemia la ha puesto en la primera prioridad de los gobiernos.

El uso de la tecnología debe centrarse no solo en la impartición de clases no presenciales. Debe incluir el desarrollo de plataformas de educación ágiles y flexibles adecuadas a todos los niveles y tipo de enseñanza. Debe permitir la generación de contenidos de mayor calidad y que incidan sobre capacidades de los escolares relacionadas con la creatividad, la innovación, la investigación y el trabajo en equipo. Y debe facilitar al profesorado la realización de su labor con herramientas mas potentes y versátiles.

Pero, aún siendo esto importante, existe un problema mas grave. La “brecha digital” que ha surgido con toda su crudeza este 2020.

Hay que conseguir que todos los niños tengan acceso a los medios adecuados tecnológicos con independencia del nivel económico de su familia. Sin ello, nada será posible.

Esta pandemia debería ser una gran oportunidad para repensar los medios y modernizar la educación intentando que ningún niño se quede atrás.

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